Para lograr una vida plena y equilibrada debemos conocer y trabajar los cuatro pilares de la vida: mente, cuerpo, espíritu y corazón. De nada sirve enfocarnos en nuestro cuerpo si nuestra mente está agobiada, nuestro corazón dañado o no sabemos dónde está nuestro espíritu.
Parece difícil conseguir un equilibrio entre los cuatro pilares pero con esfuerzo y concentración podrás tomar conciencia de cómo funcionan todos ellos y de cómo afectan y ayudan a mejorar tu vida y el sentimiento consciente de ti mismo.

Cuerpo: cuerpo sano, mente sana
Nuestro cuerpo es un templo sagrada. Debemos cuidarlo, alimentarlo bien, mimarlo y entrenarlo. Un cuerpo que goce de buena salud será el lugar ideal para alojar los demás pilares de la vida.

Mente: tu libertad está en la mente
No es posible escapar de los pensamientos, ni de las emociones ni de las preocupaciones. Por eso hay que trabajar este pilar para que estos pensamientos no terminen inundando nuestra mente y agobiándonos.
La concentración es fundamental para ello, permitiéndonos, centrarnos en lo realmente importante y en aquellos aspectos de nuestra vida que podamos controlar.

Espíritu: existir es resistir
Nuestro alma, eso que nos caracteriza y nos hace únicos ¿Quiénes somos realmente? ¿Qué nos gusta hacer? Esas son las preguntas a las que responde nuestro espíritu.
El espíritu trabaja a la par con la mente. Tomarse un tiempo para pensar en uno mismo y sentirse; regalarse un momento cada día para enfocarnos en el presente, en el aquí y ahora; meditando o disfrutando mientras haces aquello que te apasiona. Así se cuida el espíritu, siendo conscientes de lo que somos y dedicando tiempo para conocernos a nosotros mismos.

Corazón: cuidar el corazón, cuidar el alma
El corazón está lleno de sentimientos, hacia fuera y hacia dentro; debe dar, pero también debe recibir; amar y ser amado. Solo así se puede tener un corazón equilibrado capaz de dar energía a los demás pilares de la vida.
En las relaciones sociales se caracteriza por el afán de querer conocer a los demás de una manera profunda y de querer formar parte de sus vidas junto con ellos.
Es importante también amarnos a nosotros mismos, dedicando esfuerzos a nuestras necesidades, aceptarnos tal y como somos, respetarnos y sacar siempre nuestra mejor versión.
Por una vida plena y en armonía con el mundo que nos rodea
Es tu momento para comenzar a vivir, a sentir y a conocerte a ti mismo. Estos son los cuatro pilares que debemos trabajar y cuidar para conseguir vivir una vida plena, consciente y en armonía con el mundo que nos rodea.
One Comment
Pingback: